domingo, 6 de noviembre de 2016
jueves, 15 de septiembre de 2016
jueves, 5 de mayo de 2016
jueves, 10 de marzo de 2016
Una mirada más cercana al Fondo Estatal de Petróleo de la República de Azerbaiyán
Una mirada más cercana al
Fondo Estatal de Petróleo de la
República de Azerbaiyán
por Ramiro
Rodriguez Bausero
1 Introducción
La aparente existencia de petróleo y gas - en
cantidades que lo tornarían comercialmente rentable - en la plataforma continental de Uruguay ha
instalado el debate a nivel nacional[1]
respecto de la necesidad de definir eventuales cursos de acción en caso de que
se confirmen las hipótesis y estudios de prospección[2], y
nuestro país pase a integrar el conjunto de Estados productores de – todavía –
tan importantes recursos energéticos.
En efecto, y a pesar de los precios presentes a
niveles históricamente bajos, el consorcio formado por la francesa Total y
ExxonMobil iniciarán en algunas semanas una perforación ultraprofunda en la
plataforma del Océano Atlántico, a 250 kms de la costa de Punta del Este[3].
En este marco, la experiencia de países que ya han
transitado por el camino de haber encontrado hidrocarburos, puede ilustrar
acerca de diferentes alternativas que han elegido respecto de su gestión,
utilización y destino de los ingresos por la comercialización de tales recursos.
Esta discusión recién se está iniciando en Uruguay, la cual seguramente se
intensificará conforme vayan transcurriendo las diferentes etapas y se
confirmen las predicciones/hipótesis más optimistas[4].
En Azerbaiyán, el descubrimiento de petróleo data
de mediados del siglo XIX, aunque la definición de una solución frente al
aluvional ingreso de divisas fue resuelta luego que el país recobró la vida
independiente – y por lo tanto, la soberanía sobre sus recursos energéticos - en
los años 90 del siglo XX.
Antes de acercar la mirada al Fondo Soberano azerbaiyano,
realizaremos una aproximación a las generalidades de este tipo de entidades.
2 Los Fondos Soberanos
La aparición y posterior explotación de recursos
naturales en ciertos países puede redundar en un desequilibrio económico en
lugar de contribuir al desarrollo. En tal sentido, si los efectos positivos
iniciales del crecimiento no son controlados o compensados por las autoridades
que manejan la economía y las finanzas del país, esa expansión puede derivar en
la llamada paradoja de la abundancia, cuya versión más concreta es la
denominada enfermedad holandesa, que refiere “a los desequilibrios que sufre un
Estados como consecuencia de la fuerte entrada de divisas asociada al
encarecimiento de una materia prima – típicamente los hidrocarburos - de la que
el país es exportador neto”[5].
Una de las posibilidades que se le presenta a un
Estado para disminuir este riesgo, además de intervenir con la política fiscal
y la monetaria, es la de ahorrar las divisas que se generan por la exportación
de esas materias primas a través de una entidad especializada, los llamados Fondos
Soberanos – o Sovereign Wealth Funds, según el término acuñado en 2005 por
Andrew Rozanov-, definidos como un vehículo
de inversión propiedad del Estado, pero gestionado de forma independiente, que
invierte los capitales generados por la exportación de una o varias materias
primas[6] en una amplia gama de
activos – acciones, bonos, inmuebles, fondos de capital, fondos de cobertura,
etc- de forma diversificada y con un horizonte temporal a largo plazo[7]. Otras
definiciones amplían el origen del exceso de ahorro a excedentes
presupuestarios, como en el caso de Singapur, a abundantes reservas de divisas,
como en el caso de los Fondos chinos[8].
Desde el año 2005, más de 40 Fondos han sido constituidos[9].
De acuerdo al ranking del Sovereign Wealth Fund
Institute[10], los cinco principales
Fondos basados en commodities a nivel mundial son el Government Pension Fund de
Noruega, con activos valuados en USD 825.000 millones; el Abu Dhabi Investment
Authoriry de Emiratos Arabes Unidos por USD 773.000 millones; SAMA Funding
Holdings de Arabia Saudita, con activos por USD 632.000 millones; Kuwait
Investment Authority con USD 592.000 millones; y el Qatar Investment Authority,
cuyos activos están valuados en USD 256.000 millones. A nivel latinoamericano,
y un poco más abajo en la lista, los principales fondos son el Fondo de
Estabilización Social y Económica de Chile valuado en USD 15.000 millones; el
también chileno Fondo de Reserva de Pensiones con USD 8.000 millones – estos
dos Fondos reemplazaron al Fondo de Estabilización del Cobre constituido en
1987-; y el Fondo de Estabilización de los Ingresos Petroleros de México, con
activos que alcanzan los USD 6.000 millones.
El objetivo que persiguen estas entidades es doble:
por un lado, tratar de evitar o paliar las distorsiones que provoca la ya
citada enfermedad holandesa, al mantener la estabilidad económica frente a la
volatilidad de los precios de esos recursos; y por el otro, garantizar la
transmisión de esas ganancias hacia las futuras generaciones, ante el riesgo de
agotamiento de esa materia prima – y por lo tanto, de esa fuente de divisas - o
variaciones de su precio.
En relación a las inversiones que realizan los
Fondos Soberanos, puede distinguirse un grupo de ellos que priorizan sus
inversiones en el exterior y en sectores poco relacionados con las materias
primas, cuyo caso paradigmático es el del fondo noruego. En el otro extremo,
algunos Fondos – como es de varios países de África – que patrocinan una
intervención mayor en sus propios países con el objetivo de impulsar su propio
desarrollo. Finalmente, otros, como los de Oriente Medio, que si bien también
están enfocados en inversiones en el exterior, tienen objetivos que van más
allá de los estrictamente financieros.
3 El caso azerbaiyano: el SOFAZ
Azerbaiyán entendió de manera temprana la
importancia de realizar un manejo eficiente de los recursos petroleros
generados. Las reservas probadas de petróleo del país se estiman en 7.000
millones de barriles, con una producción de 870.000 barriles/día. En este
sentido, la empresa estatal azerbaiyana, la State Oil Company of Azerbaijan,
SOCAR, juega un rol primordial en esta industria, tanto en el manejo de las
importaciones y exportaciones de hidrocarburos[11],
como en su importante presencia en proyectos regionales e internacionales
relativos a su comercialización, distribución y transporte[12].
Con la firma del denominado Contrato del Siglo en
setiembre de 1994[13],
se sentaron las bases de la presencia y cooperación con las compañías
internacionales y países que participaron en el mismo, todo lo cual redundó en
el desarrollo y la integración de Azerbaiyán al mundo, así como el inicio de la
espectacular entrada de capital extranjero al país. La firma de estos acuerdos
de producción compartida entre la SOCAR, British Petroleum y la Statoil de
Noruega tenía por objeto la explotación de los campos offshore - del Mar Caspio - de Azeri, Chirag y
Gunnashli. Posteriormente aumentó la participación de compañías y se creó la
Compañía de Operaciones Internacional de Azerbaiyán, AIOC en inglés, que
nucleaba a 11 empresas internacionales de 7 países más la empresa estatal
azerbaiyana. Desde esta fecha hasta abril de 1999 se han firmado 22 nuevos
contratos que incluyen a 38 transnacionales de 15 países distintos[14].
El Fondo Estatal de Petróleo de la República de
Azerbaiyán, SOFAZ de acuerdo a su sigla en inglés, es una entidad extra
presupuestaria estatal azerbaiyana creada mediante decreto del Presidente
Heydar Aliyev de diciembre de 1999[15],
y operativo desde 2001.
La decisión de constituir este Fondo se enmarca en
la necesidad del país de definir una estrategia en materia petrolera luego de
los acuerdos firmados por el país a partir de 1994 con las grandes empresas
petroleras internacionales. La llamada Estrategia Petrolífera Nacional está
basada en la atracción de inversión extranjera, el establecimiento de varias
alternativas exportadoras, y en el manejo eficiente y transparente de los ingresos
generados.
En 2014, el SOFAZ fue el 17º mayor Fondo de su
clase a nivel mundial, alcanzando activos por más de USD 37.000 millones, valor
69 veces mayor que el nivel de activos que presentaba en 2001. Para el mes de octubre de 2015, los activos cayeron
un 6.38%, descendiendo a USD 34.738 millones[16].
La referida Estrategia fue concebida a largo plazo,
para el período 2005-2025[17],
considerando los ingresos por la explotación a gran escala de los hidrocarburos
del país por un lado, con la necesidad de preservar la estabilidad
macroeconómica y asegurar la eficiente y
equilibrada utilización de esos ingresos para las generaciones presentes y
futuras, por el otro.
La Misión del Fondo es transformar las reservas de
hidrocarburos en activos financieros, que son utilizados para financiar obras
de infraestructura estratégicas y proyectos sociales de escala nacional, y
asegurar la representación del país en los acuerdos internacionales de
exploración de recursos naturales[18].
La filosofía que subyace detrás de la creación de esta entidad es la de
asegurar la igualdad intergeneracional respecto del bienestar generado por
estos ingresos.
Los objetivos que persigue el SOFAZ son la
preservación de la estabilidad macroeconómica, asegurando la disciplina fiscal,
disminuyendo la dependencia de los ingresos petrolíferos y estimulando el
desarrollo del sector no petrolero; acumular y preservar los ingresos por la
explotación hidrocarburífera para las futuras generaciones – como ya fuera
señalado - ; y financiar proyectos de escala nacional para apuntalar el
progreso socioeconómico.
Además de los objetivos reseñados, la Estrategia
incorpora otros como impulsar el desarrollo de las regiones y las PIMEs;
implementar medidas de reducción de la pobreza; estimular la mejora de la base
intelectual, material y técnica de la economía; desarrollar el capital humano y
la capacitación profesional[19]; consolidar
las capacidades de defensa del país; y ejecutar proyectos relativos a la
reconstrucción en los territorios liberados y el retorno de los desplazados a
sus hogares[20].
La principal responsabilidad del Fondo es la de asegurar
la acumulación y manejo efectivo de las divisas y otros activos generados por
la implementación de los acuerdos de exploración y desarrollo de petróleo y gas
y de las actividades del Fondo[21].
3.1 Estructura
El SOFAZ está dirigido por un Director Ejecutivo[22],
elegido por el Presidente de la República de Azerbaiyán. El Director Ejecutivo
representa al Fondo, gestiona la entidad, selecciona a sus empleados, prepara
el presupuesto anual para su aprobación por el Presidente de la República y
asegura que sus inversiones se realicen de acuerdo a las Directivas del Poder Ejecutivo.
Esta institución es responsable ante el Presidente
de la República de Azerbaiyán; sus actividades están vigiladas por un Consejo
Supervisor – Supervisory Board - ,
que revisa el proyecto de presupuesto anual, la memoria anual y sus estados
financieros - junto con un auditor externo -, sobre todo lo cual emite sus
comentarios y formula recomendaciones. Este Consejo está integrado por seis
miembros: el Primer Ministro de Azerbaiyán, el Ministro de Finanzas, el
Ministro de Economía e Industria, el Presidente del Banco Central, un asesor
económico del Presidente de la República, y un representante del Parlamento
azerbaiyano[23]. Una de las objeciones que
se citan frente a esta composición del Consejo Supervisor, es la no inclusión
de representantes de la sociedad civil ni del sector empresarial.
3.2 Ingresos, inversiones y ahorro
De acuerdo a su Estatuto[24],
las fuentes de ingreso del Fondo consisten en
§ ingresos generados por la implementación de los
acuerdos de exploración, desarrollo y producción de los yacimientos de petróleo
y gas en territorio azerbaiyano – los llamados production sharing agreements o PSAs -, incluyendo el área territorial
correspondiente en el mar Caspio, así como de otros acuerdos sobre exploración,
desarrollo y transporte que concluya la State
Oil Company of the Republic of Azerbaijan – SOCAR;
§ las regalías abonadas por las empresas inversoras en
el marco de los acuerdos concluidos;
§ montos pagos al SOCAR por concepto de la utilización
de los terrenos vinculados a las zonas de explotación – derecho de superficie-;
§ los dividendos generados bajo los términos de los
acuerdos concertados;
§ los ingresos generados por el transporte de
petróleo y gas por territorio azerbaiyano[25];
§ ingresos generados por la transferencia de activos
de un inversor a un ente estatal azerbaiyano autorizado;
§ ingresos generados por la colocación,
gerenciamiento, venta u otra utilización de los activos del Fondo.
§ donaciones, y otros[26].
La utilización de los activos del Fondo se dividen
en tres áreas: transferencias al presupuesto nacional – el destino principal
como se verá - , gastos en proyectos específicos de infraestructura o de
carácter social, y gastos administrativos. Anualmente se realiza un presupuesto
de gastos, el cual debe ser aprobado por el Presidente de la República, no
siendo admisible ningún gasto por fuera de esa planificación.
Los activos del Fondo son gestionados de acuerdo a
las Directivas de manejo de activos aprobadas por Decreto presidencial Nº 511
del 19 de junio de 2001. En tal sentido, y como criterio general, los mismos deberían
canalizarse para solucionar los problemas más importantes del país, así como
para la construcción y reconstrucción de obras de infraestructura, con el fin
de alcanzar su desarrollo socioeconómico[27]. Asimismo,
se establece preceptivamente que estos activos que integran el Fondo no deben
ser objeto de préstamos a entidades gubernamentales, ni empresas privadas, ni
ser parte de garantías u afectaciones de ese tipo.
La estrategia de inversión tiene un carácter
conservador, con el objetivo de obtener un retorno razonable con la menor
exposición posible al riesgo[28].
Esto es posible mediante la diversificación de las opciones en una amplia gama
de activos y regiones del mundo[29],
junto con un estricto monitoreo del entorno macroeconómico.
De acuerdo a las Directivas referidas, los activos
del SOFAZ pueden ser colocados en depósitos bancarios[30],
en títulos emitidos por Estados, instituciones financieras internacionales - respecto
de lo cual está preceptivamente establecido que debe tratarse de bancos
comerciales y otras entidades financieras con calificaciones crediticias
mínimas de acuerdo a las principales calificadoras de riesgo internacionales[31]-,
fondos de inversión, acciones, bienes raíces y oro.
La normativa en este punto establece
preceptivamente que el 80% del portafolio inversor debe ser invertido en
obligaciones de deuda y otros instrumentos - money market instruments -; hasta el 10% en acciones – equities-; hasta el 5% en bienes raíces[32],
y hasta el mismo porcentaje en oro. A partir de 2016, el límite para las
inversiones se modifica en 70% para los primeros, 15% para las acciones,
mientras que para los inmuebles el límite se eleva al 10%[33].
De acuerdo al Reporte de 2014, el portafolio inversor
estaba compuesto de 87.5% de la primera categoría – “fixed income” -, seguido
de 6.5%, 2.9% y 3.1% en inversiones en acciones, inmuebles y oro,
respectivamente[34][35].
Los activos en los que puede invertir el Fondo
deben estar nominados en monedas pertenecientes a los países que integran el
G7, o las correspondientes a países que integran la Unión Monetaria Europea, o expresados
en rublos y liras turcas, o finalmente, en monedas de Estados con
calificaciones crediticias no menores a A -S&P’s, Fitch- o A2 - Moody’s-. Para
el caso de activos nominados en monedas no mencionadas expresamente, es
necesaria su cobertura frente a fluctuaciones cambiarias respecto al dólar de
Estados Unidos[36]. Efectivamente, el portafolio está
diversificado en activos nominados en dólares norteamericano – 50% -, euros –
35% -, y libras esterlinas en un 5%, mientras que el 10% restante puede estar
nominado en otras monedas permitidas por las Directivas.
Es de notar que casi el 96% del portafolio de
inversión está gestionado internamente por el Fondo, mientras que poco más del
4% lo está por asesores y gestores externos como el World Bank, Deutsch Bank
Advisors, y UBS Asset Management[37].
Con relación a los ahorros del Fondo – entendidos
como la diferencia entre sus ingresos y sus gastos -, el Decreto presidencial y
la Estrategia de Largo Plazo establecen que el 25% de los ingresos deben
ahorrarse una vez que los mismos hayan alcanzado su pico máximo[38],
hecho que se habría evidenciado en el año 2010. De todos modos, si bien este porcentaje
ya se venía alcanzando con creces desde la creación del Fondo – salvo en 2006 -
, a partir de 2008 – cuando llegó al 60%-, el mismo ha venido decreciendo alcanzando
el en 9,5% en 2013[39], y
ubicarse en 7.6% en 2014[40].
La proporción de transferencias del Fondo al
presupuesto nacional de Azerbaiyán, ha ido creciendo a partir de 2007, cuando
pasaron de significar del 10% al 35% del presupuesto estatal[41].
La ocurrencia de la crisis financiera global y la consiguiente caída en los
precios del petróleo determinaron que el 58% del presupuesto del Estado en 2013
se originara en este Fondo Soberano[42]. Este
porcentaje se situó en el entorno del 51% en 2014.
Por otra parte, estas transferencias desde el SOFAZ
al presupuesto nacional pasaron de alrededor del 55% del total de los egresos del
Fondo antes de 2008, a 88% en ese año, a casi 94% en 2012[43],
y 92.3% en 2014[44].
Esta política no ha estado exenta de
cuestionamientos respecto de la sustentabilidad fiscal del país - crecimiento
del gasto que no puede ser respaldado
por las futuras proyecciones de ingresos -, y las crecientes aportaciones del
Fondo al presupuesto estatal, en un contexto de fluctuaciones a la baja del precio
del petróleo y decrecientes niveles de producción[45]. Bajo
la perpetuación de esta política, se estaría vulnerando uno de los objetivos
constitutivos del SOFAZ que es precisamente el de asegurar recursos para las
futuras generaciones, priorizando el gasto en lugar de las inversiones a largo
plazo[46].
A finales del año 2015 fue aprobado el presupuesto
anual del Fondo para el año 2016[47][48],
en el cual se estima que los ingresos del mismo ascenderán a AZN 6.711
millones, lo que equivale a unos USD 4.200 millones, de los cuales el 90%
corresponderán a ingresos por la comercialización de hidrocarburos. En materia
de erogaciones, el presupuesto aprobado por el Presidente de la República
estima poco más de AZN 8.100 millones
- unos USD 5.160 millones - , los cuales estarán desglosados en AZN
6.000 millones en transferencia al Presupuesto de la República de Azerbaiyán,
unos 1.823 millones para financiar parte del proyecto del Southern Gar Corridor[49], y cantidades
menores para financiar el proyecto ferroviario Baku-Tbilisi-Kars[50],
así como mejoras en las condiciones de refugiados, en el sistema educativo, y
los gastos administrativos del propio Fondo.
3.4 Transparencia
Los Fondos Soberanos presentan diversos grados de
transparencia; de hecho, algunos dan a conocer sus inversiones y gastos de
manera periódica, mientras que otros mantienen esas cifras sin ser divulgadas públicamente.
A partir de 2008, con la creación del índice de transparencia Linaburg-Maduell,
estas entidades han comenzado a avanzar en la dirección de una mayor apertura en
su gestión.
A los efectos de coordinar el relacionamiento
público del SOFAZ, en 2007 se aprobó la llamada Política de Información, con el
objetivo de satisfacer las demandas de la ciudadanía relativas al conocimiento
público sobre el manejo del Fondo y para mantener su reputación como una
entidad transparente.
En tal sentido, el SOFAZ reporta en forma
trimestral a la prensa y anualmente en su sitio web – en idiomas azerbaiyano e
inglés – acerca del total de sus activos, detalle de ingresos y gastos, así
como intereses generados. Asimismo, se incluye en esos informes información
relativa a las inversiones del Fondo, discriminadas según distribución
geográfica, rating crediticio de los bonos, bienes raíces, etc., desde el
inicio de sus operaciones en 2001.
El Fondo es auditado regularmente por la Cámara
Auditora de la República de Azerbaiyán y por una compañía internacional
independiente. Recientemente, la firma auditora elegida para el período
2013-2015 fue Pricewaterhouse Coopers.
En el año 2003 Azerbaiyán voluntariamente se
convirtió en país piloto de la EITI, Extractives
Industries Transparency Iniciative, organización de la que se convirtió en
candidato en 2009. Como resultado de su compromiso con los estándares de esta
organización, el SOFAZ obtuvo en el año 2007 el reconocimiento del Servicio
Público de Naciones Unidas en la categoría “Mejora en la transparencia,
responsabilidad y respuesta en el Servicio Público”. De hecho, Azerbaiyán fue
el primer país en alcanzar los requerimientos y estándares de esta organización[51].
Del mismo modo, el Fondo ha obtenido buenas
puntuaciones en los principales índices de transparencia: 10/10 en el
Linaburg-Maduell Transparency Index – el mismo puntaje que, por ejemplo, el fondo
noruego, el chileno, o el de Alaska-; y 13/14 en el Truman Scoreboard.
El SOFAZ colabora con otros Fondos Soberanos a
nivel mundial, en el marco del International
Forum on Sovereign Wealth Funds, IFSWF, establecido en abril de 2009. Este
Foro agrupa voluntariamente a Fondos Soberanos de distintos países a los
efectos de intercambiar puntos de vista respecto de asuntos de interés común y
propiciar el entendimiento e implementación de los llamados 24 Principios de
Santiago[52], a los cuales adhirió el
SOFAZ en mayo de 2011.
4 Reflexiones finales
De confirmarse la existencia de hidrocarburos
pasibles de ser explotados de manera rentable, y a pesar de la coyuntura actual, Uruguay se encontraría ante una oportunidad y también frente a un
desafío importante, que necesariamente implicaría la toma de decisiones complejas,
basadas en una política de Estado más allá de horizontes cortoplacistas
sustentados en consideraciones políticas circunstanciales.
La constitución de Fondos
Soberanos por parte de diferentes Estados – como Azerbaiyán - particularmente
los que poseen este tipo de commodities
tan demandados todavía - , ha sido, con sus matices y particularidades, la
solución encontrada para que tratar de evitar que el incremento del ingreso de divisas
a las arcas nacionales no termine por desestabilizar la economía y
eventualmente enfrentarla a una maldición o enfermedad holandesa como la que
han experimentado tantas economías.
De todos modos, la mera constitución de estas instituciones no garantiza
el éxito de su gestión y de los objetivos a perseguir. Es necesario que las
mismas se conduzcan bajo estándares de profesionalismo técnico, visión a largo
plazo frente a la toma de decisiones, rendición de cuentas y transparencia
frente a la ciudadanía y los organismos de control. Debe evitarse por todos los
medios caer en la tentación de utilizar arbitrariamente esos ingresos en
cuestiones coyunturales y cercanas, en detrimento de objetivos estructurales y
de fondo.
Como fuera dicho, la discusión recién se está instalando en Uruguay, a
la espera de los resultados de las prospecciones de las compañías adjudicatarias.
Todavía hay tiempo suficiente para idear un camino que pueda amalgamar el
interés nacional y su inmanente derecho soberano de explotar estos eventuales ingresos,
con la presencia de las grandes empresas trasnacionales también, y naturalmente
interesadas en la búsqueda de la mayor rentabilidad posible.
Fuentes consultadas
Aslanli, Kenan – Fiscal
sustainability and the State Oil Fund of Azerbaijan. Journal of Eurasian
Studies, Vol. 6. 2015.
Assenova, Margarita y Zaur
Shiriyev, Eds. – Azerbaijan and the New
Energy Geopolitics of Southeastern Europe. The Jamestown Foundation, Washington DC. Junio
2015.
Cano, David - Fondos soberanos: lógica económica, impacto
geoestratégico. Revista Estudios de Política Exterior. Disponible en http://www.politicaexterior.com/articulos/economia-exterior/fondos-soberanos-logica-economica-impacto-geoestrategico. Fecha de consulta 6/2/2016
Khank Le, Tommy, y Oskar
Munthe-Dahl – Natural Resources Funds as
mechanisms for avoiding the resource curse. A comparative study of Kazakhstan,
Azerbaijan and Norway. University of Agder, School of Law, 2014.
Mañé Estrada, Aurelia y Josep Lladós Masllorens – El auge del
petróleo en Azerbaiyán: ¿Síndrome holandés o de Washington? Universitat de Barcelona– Universitat
Autònoma de Barcelona, 1999 – Disponible en http://pendientedemigracion.ucm.es/info/ec/jec7/pdf/com7-3.pdf
State Oil Fund of the Republic of Azerbaijan. Annual Report 2014. Disponible
en www.oilfund.az/uploads/annual_2014en.pdf
[1] Que incluso motivó una convocatoria del Presidente de la República,
Dr. Tabaré Vázquez, a todos los ex Presidentes desde la restauración
democrática.
[3] https://www.presidencia.gub.uy/comunicacion/comunicacionnoticias/ancap-total-exxonmobil-coya-perforacion
[4] Aunque
no es unánime el deseo que se confirme la existencia de tales hidrocarburos,
como la han expresado el ex Presidente Dr. Jorge Batlle - http://www.elobservador.com.uy/ojala-no-haya-petroleo-uruguay-jorge-batlle-expresidente-n862480
- , y el pensador y escritor Ing. Juan Grompone - https://www.enperspectiva.net/en-perspectiva-radio/la-mesa/la-mesaojala-no-haya-petroleo-dice-juan-grompone
- , entre otros.
[5] Cano, David – Fondos Soberanos: lógica económica, impacto
geoestratégico. Revista Estudios de Política Exterior. Disponible en http://www.politicaexterior.com/articulos/economia-exterior/fondos-soberanos-logica-economica-impacto-geoestrategico/.
[6] Aunque el origen de los activos del Fondo pueden ser reservas
transferidas del propio Estado, o ingresos provenientes de la exportación de
bienes manufacturados, como en el caso de los Fondos de China o Singapur.
[7] Cano, David – Op. cit.
[8] http://www.eleconomista.es/mercados-cotizaciones/noticias/818570/10/08/Que-es-un-fondo-soberano.html
[9] http://www.swfinstitute.org/sovereign-wealth-fund/
[10] Disponible en
http://www.swfinstitute.org/sovereign-wealth-fund-rankings/
[11] Fuente: BP Statistical Review of
World Enegy 2014.
[12] Ejemplo de esta
presencia de la SOCAR fuera de fronteras es la participación accionaria en la
empresa de distribución griega de gas DESFA, o su rol principal en el
desarrollo del megaproyecto del Trans Anatolian Pipeline, TANAP, en territorio
turco, entre otros - Socor, Vladimir y Matthew Czekaj – Southeastern Europe´s Energy Nexus: A Crossroads of Pipelines and
Geopolitics, extraído de Assenova, Margarita y Zaur Shiriyev, Eds. – Azerbaijan and the New Energy Geopolitics of
Southeastern Europe. The Jamestown Foundation, Washington DC. Junio 2015.
[13] Es la denominación que se le dio a la firma de 20 acuerdos de
producción compartidas – Production Sharing Agreements – entre la empresa
petrolera de Azerbaiyán con grandes empresas internacionales del rubro.
[14] Mañé Estrada,
Aurelia y Josep Lladós Masllorens – El
auge del petróleo en Azerbaiyán: ¿Síndrome holandés o de Washington? Universitat de Barcelona– Universitat
Autònoma de Barcelona, 1999 – Disponible en http://pendientedemigracion.ucm.es/info/ec/jec7/pdf/com7-3.pdf
[15] Y aprobado por Decreto Presidencial Nº 434 de diciembre del 2000.
[16]
http://www.oilfund.az/en_US/hesabat-arxivi/rublukh/2015_1/2015_1_3/
[17] Disponible en http://www.oilfund.az/uploads/5-eng-long-term.pdf
[19] Se
destaca en este sentido, el Programa que fomenta la educación de estudiantes
azerbaiyanos en el exterior.
[20] Directa referencia al territorio de Nagorno Karabakh.
[21] Estatuto del SOFAZ, artículo 2. Disponible en http://www.oilfund.az/uploads/status.pdf
[22] Actualmente el Director Ejecutivo es Shahmar Movsumov.
[24] Artículo 3.
[25] A través de los oleo y gasoductos Bakú-Supsa, Bakú-Tbilisi-Ceyhan y
Bakú-Tbilisi-Erzurum.
[26] En el caso del SOFAZ, para el año 2012, casi el 96% de sus ingresos
correspondieron a ganancias por las ventas de petróleo y gas, mientras el resto
lo hicieron al manejo de los activos del Fondo.
[27] Estatuto, artículo 4.2.
[29] Para el año 2014, distribuídas en 52% en Europa, 24% en
Norteamérica, y 13.5% en Asia-Pacífico.
[30] De acuerdo a las Reglas de Manejo de los activos del SOFAZ, y la
Política de Inversiones del SOFAZ, aprobadas por sendos Decretos del Presidente
de la República de Azerbaiyán, los bancos deben tener una calificación
crediticia no menor de AA- (según Standard & Poor’s), Aa3 (de acuerdo a
Moody’s), o AA- (según la escala de Fitch).
[31] Nuevamente, no menor de AA- (según Standard & Poor’s), Aa3 (de
acuerdo a Moody’s), o AA- (según la escala de Fitch).
[32] A partir de 2012, el Fondo ha adquirido algunos inmuebles en
grandes ciudades como Londres, Paris, Moscú, Tokyo y Seúl. Recientemente fue anunciada
la compra conjunta con Fondos similares de Qatar y Abu Dhabi de un inmueble en
Milán por valor de USD 380 millones.
[33] De acuerdo al último informe anual completo disponible, correspondiente
al ejercicio 2014, el portafolio de inversiones del Fondo se distribuyó en un
87% obligaciones contraídas en el mercado financiero; 6,5% fueron invertidas en
equities; 2,9% en bienes raíces; y 3,1% en oro.
[35] El Informe del 2014 es el último informe de año completo, el cual
se encuentra disponible en http://www.oilfund.az/uploads/annual-2014en.pdf.
[36] Artículo 3, Rules on management of foreign currency assets of the
State Oil Fund of the Republic of Azerbaijan, del 21 de diciembre de 2001 –
Decreto Presidencial Nº 607-, bajo la última actualización de octubre de 2011.
[37] Reporte del 2014, disponible en http://www.oilfund.az/uploads/annual-2014en.pdf.
[38] Long Term Strategy on the
Management of oil and gas revenues, disponible en http://www.oilfund.az/uploads/5-eng-long-term.pdf
[39] Disponible en http://www.oilfund.az/uploads/annual_2013en.pdf
[40] Reporte del 2014 disponible en http://www.oilfund.az/uploads/annual-2014en.pdf.
[41] Khank
Le, Tommy, y Oskar Munthe-Dahl – Natural
Resources Funds as mechanisms for avoiding the resource curse. A comparative
study of Kazakhstan, Azerbaijan and Norway. University of Agder, School of
Law, 2014.
[44] Reporte del 2014, disponible en http://www.oilfund.az/uploads/annual-2014en.pdf.
[45] Aslanli, Kenan – Fiscal
sustainability and the State Oil Fund of Azerbaijan. Journal of Eurasian
Studies, Vol. 6. 2015.
[49] Iniciativa europea que busca proveer gas desde el Mar Caspio hacia
Europa Balcánica y Central, a través de una red de gasoductos desde Azerbaiyán.
[50] Proyecto ferroviario que pretende unir la capital azerbaiyana con
la ciudad turca de Kars, pasando por la capital de Georgia.
[52] Se trata de los Principios y Prácticas Generalmente Aceptados, PPGA
, adoptados en la Reunión del Grupo Internacional de Trabajo de los Fondos
Soberanos de Santiago de Chile de setiembre 2008. Estos Principios se
establecieron con el objetivo de ayudar a
mantener la estabilidad del sistema financiero mundial, la libre circulación de
capitales y la inversión; cumplir con toda la reglamentación en los países en
los que invierten; invertir sobre la base de criterios económicos y financieros
y bajo consideraciones de riesgo y retorno; y disponer de un gobierno
corporativo transparente que provea de controles operacionales adecuados,
gestión del riesgo y rendición de cuentas. Fuente:
http://www.hacienda.cl/fondos-soberanos/preguntas-frecuentes/que-son-los-principios-de-santiago.html
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